Tener oponentes formidables para luchar limpiamente
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ASPECTO FÍSICO
Ignia guarda un gran parecido físico con su padre, habiendo heredado sus escamas rojo oscuro, la parte inferior de un claro beige y la nariz con punta de cuerno de Igneel. Al ser un dragón, es grande en tamaño con alas de murciélago y tiene dientes y garras afiladas. Ignia tiene varias espinas caudales alrededor de su cara, con un gran cuerno con forma de cristal que sobresale de la parte superior de su cabeza. Se pueden ver dos tatuajes en forma de fuego en su pecho, y las llamas irradian varias partes de su cuerpo, como su cabello. Se puede ver que alrededor de sus ojos también tiene un maquillaje oscuro.
En forma humana, Ignia adquiere la apariencia de un hombre tonificado y musculoso. Su cabello claro está peinado hacia arriba, con las puntas ligeramente teñidas de oscuro y dos mechones que enmarcan los lados de su cabeza. Tiene varios tatuajes en la parte superior del cuerpo, incluidos los que parecen llamas en la cara, un sol que cubre gran parte de su pectoral izquierdo y un diseño tribal que recorre su brazo izquierdo. Para el atuendo, Ignia lleva pantalones sueltos con un forro de piel en el medio: la parte superior es de color oscuro, mientras que la parte inferior es clara. Lleva una envoltura alrededor de su cintura, con un paño similar a un delantal sobre sus pantalones, con formas de diamante y un diseño en X. Los vendajes cubren su antebrazo derecho, y sus accesorios incluyen tres pendientes triangulares en cada oreja y una gran cadena alrededor de su cuello con un colgante en forma de cruz.
Personalidad
Por lo que se ha visto, Ignia tiene una personalidad muy combativa, queriendo hacer más fuerte a su hermanastro Natsu solo para que algún día pueda luchar contra él en igualdad de condiciones. Es muy fanático del fuego, declarando que era el mejor elemento a la hora de destruir, argumento que apoyó mientras quemaba una ciudad. Se ve que es muy insensible, ya que no le importó nada que su padre muriera protegiendo a Natsu, o cuando amenazó de muerte a los amigos de Natsu para que este peleara con furia.
Según Mercuphobia, Ignia es el más beligerante de los Cinco Dioses Dragón, argumento apoyado por el hecho de que, a fin de obtener un oponente formidable, Ignia no se preocupa por el bienestar de quienes lo rodean, como quemar el puerto de Elmina con sus residentes y destruir muchos países.
Historia
Pasado
Ignia ha existido desde hace 400 años, desde el primer Festival del Rey Dragón. Nació del Rey Dragón de Fuego, Igneel y una dragona hembra sin nombre durante la época de apareamiento de los dragones. Durante la Guerra de los Dragones, Ignia escapó junto a un indeterminado número de dragones a Giltena para evadir a Acnologia, siendo uno de los cinco dragones que sobrevivieron y más tarde se ganaron el apodo de los Cinco Dioses Dragón, que eventualmente acabaron por igualar el poder del Rey Dragón.
Saga 100 Años de Búsqueda
Durante la batalla de Natsu contra Mercuphobia, Ignia percibió la situación e intervino para salvar a Natsu de los remolinos celestiales del Dios Dragón del Agua. Al informar al equipo de Natsu que Mercuphobia sólo está luchando a medias, Ignia siembra de fuego la Ciudad Elmina para comprobar cuánto de sí mismo se ha perdido. Como su fuego es capaz de quemar incluso el agua, Mercuphobia instintivamente comienza a tratar de apagar el infierno que Ignia ha causado con su agua. Entonces, Ignia dirige su atención a Natsu y le dice que se coma esas llamas para poder derrotar a Mercuphobia, porque su poder ni de lejos era suficiente. Luego toma forma humana y se revela a sí mismo como el Dios Dragón del Fuego a Natsu, y como el hijo biologico de Igneel, el hermanastro de Natsu. Le dice al Dragon Slayer de Fuego que no participará en la pelea entre ellos y Mercuphobia, ya que quiere que Natsu se fortalezca por sí mismo para que los dos tengan una gran batalla.